domingo, 1 de agosto de 2010

De tarde en tarde

 

De tarde en tarde quiero que vengas
a decirme algo,
por ejemplo, que existes y sabes que existimos,
que la vida no es todo tirar hacia delante
sin pararse a pensar
eso que ya no somos ni seremos ni hemos sido.
Porque ¿a veces no te ocurre
que has sentido una voz, un rostro, un gesto
y se te abren los brazos... y es el recuerdo?
¿Conocías a José, Rosario, Inés..? Se han muerto.
Tampoco están, tampoco,
ni Gruñón, ni el silencio amarillo de tus dalias,
y el mar desde tu casa se ve un poco más viejo.
También yo he envejecido:
mi voz, mi andar, mi cuerpo...
Pero la vida es esto, ya se sabe:
soñar que hay siempre tiempo
para olvidar que uno puede ser atrapado en el intento.

(Para Mª Sol, desde su pueblo)


(AGO. La Calahorra. Granada. 03-09-10. Tardes de cal viva)